A mediados del siglo XIX los mapas todavía tenían muchos espacios en blanco. Eran muchas las regiones del mundo totalmente desconocidas... para los europeos. Esta exposición nos ofrece la oportunidad de adentrarnos en la época de los viajes de exploración que iban rellenando los huecos de los mapas. Al mismo tiempo nacieron revistas que pretendían satisfacer la curiosidad de los europeos. La primera y más importante fue LE TOUR DU MONDE, publicada en París. De ella proviene la mayoría de las imágenes de esta exposición, imágenes de gran calidad y raro encanto, realizadas por los mejores ilustradores y grabadores del momento, como son Karl Girardet, Victor Adam o Gustave Doré. Desde nuestra actual perspectiva, sus textos nos descubren no sólo los paisajes y costumbres de todo el mundo, sino el asombro que les producían a los europeos. Ningún sitio existía hasta haberlo hollado un pie europeo. Apenas se aceptaba civilización que no proviniera del "Viejo Continente".